22 dic 2013

María Tasende, la mirada encantada #Moda

De Moda

María Tasende, Carballo, 35 años, actriz

José Paz







A caballo entre Madrid y Santiago, donde se encuentra realizando una de esas experiencias de los tiempos que corren llamada microteatro, a María Tasende la pillamos a la carrera, a todo papel, memorizando cuanto folio se pone delante, para enfrentarse a la serie en la que anda metida.
  No le gustan las fotos, ya me lo advierte antes de empezar, esta chica que iba para economista hasta que le tocó el gusanillo de la ficción, “Estoy acostumbrado”, le respondo; después de mirarle a la cara, a ese rostro de trazos suaves y mirada luminosa; con ella uno se reconoce en terreno tranquilo, a pesar de lo desapacible de una jornada que parece dispuesta por el enemigo.
La sesión, de menos a más, dejando que María se exprese con su cuerpo menudo. No le gusta verse en el papel de sexy, tampoco lo necesita, es muy guapa y la que la cámara nunca dejará en mal lugar.
  Al final, cuando ya estamos recogiendo los bártulos es ella quien propone fotos, y por supuesto, uno no se niega.

*Publicado en La Revista 22/12/2013

16.416PMM#Iconos#Carrero Blanco

Iconos

Foto: Imagen del Dodge 3700 tras el atentado el 20 de diciembre de 1973.


   Nadie duda de que de la factoría Chrysler en Villaverde salieran a principios de los 70 los mejores coches, “El mejor coche de España”, rezaba la publicidad referida a su modelo más lujoso, el Dodge, y con el que el ourensano Eduardo Barreiros tenía la esperanza de salvar la fábrica; no fue así.
     De aquella factoría milagro había salido el Dodge 3700 negro brillante 16.416 PMM, homónimo a otros en los que habitualmente se movilizaban los ministros del régimen de Franco.
  El 16.416 PMM no era un coche blindado pero sus casi dos toneladas -1800 kg- lo afianzaban sobre el asfalto y puede que a su usuario, un militar, hijo y nieto de militares -de abuelo también  ourensano-, Luis Carrero Blanco, se lo pareciera. Carrero se había ganado la confianza de Franco, y de una parte del régimen, convirtiéndose en el presidente del gobierno y a todas luces en el candidato previsible en cuanto a la sucesión, situación que provocaba reacciones encontradas en no pocos sectores, también en los norteamericanos, a quienes les había negado, en un gesto inaudito hasta la fecha, la posibilidad del uso de las bases militares durante la guerra de Yom Kipur, de octubre de 1973. Los americanos veían en su figura, un ser trasnochado de ideales rancios, aunque fuera él uno de los militares que se posicionó en pro de la neutralidad española en la Segunda Guerra Mundial.
     Para ser militar experimentado erró en una regla básica, la de velar por la propia seguridad personal; aquel 20 de diciembre, como era habitual en él, acudía a la misa diaria en la iglesia Francisco de Barja, acompañado por su chófer, José Luis Pérez, y un inspector de policía, Antonio Bueno; muchas veces les acompañaba también su propia hija. Una mañana fría, que a las 9.36 AM, al paso por el número 104 de la calle Claudio Coello se volvió repentinamente plomiza, lanzándolo todo por los aires. La explosión arrojó el Dodge 16.416 PMM sobre una azotea contigua a la iglesia donde el militar acababa de comulgar. Fallecieron los tres.
     Un año tardaron los integrantes del comando Txikia de ETA, que habían alquilado un sótano, en trazar una zanja subterránea hasta el medio de la calzada. La explosión detonó no pocas dudas.

*Publicado en La Revista 22/12/2013

15 dic 2013

Un personaxe con chispa#Aitor Rei#La Revista#Moda

De Moda
Aitor Rei, 33 anos, Ourense, actor.

José Paz





Dicíase dos afiadores que tiñan a mirada curtida e a personalidade afiada, non de afiar coitelos e navallas, senón de aturar toda a tropa que atopaban no seu oficio; foi a malicia, máis ca pericia dos seus dedos o que lles fixo saír cara adiante. Aitor Rei recolleu moito deles; parte aprendeuna nestes dous anos que explorou o mundo seguíndolles o fío a moitos deses homes que se perderon na distancia cunha roda a costas; o resto xa o tiña aprendido denantes.
  Vai de promoción –os actores sempre están nela- e se nota, o vello Seat Seiscentos da “Última Viaxe do Afiador” acompáñanos hoxe como se fose un máis na escena. Con Aitor non é posible unha sesión normal, de poses atrapadas e demais, non porque non se deixe, todo o contrario, todo nel é dispoñibilidade, mais, sen darmos conta, toda a súa personalidade emerxe a carón do instante; un non pode facer outra cousa que non sexa recoller esa forza bruta. E que a cultura hoxe é cuestión de enerxía.

*Publicado na Revista 15/12/2013

Saul Leiter, pintor con cámara #Iconos

Iconos

Foto: Vogue UK, 1966.

Autor: Saul Leiter.

Saúl Leiter, 1966

  Si la mirada es un buen reflejo del alma de cada persona, la de Saul Leiter (Pittsburg, 1923-Nueva York, 2013) se presenta de lo más pictórica; además de fotógrafo, Leiter, era pintor y se nota en cada una de las pinceladas que su mirada desprende sobre el objetivo. No en vano en más de una ocasión su obra fotográfica se ha comparado con el pintor Edward Hopper.
  Cabalgó como un fotógrafo errante por la ciudad de Nueva York, particularmente por el East Village, sin pedir nada a cambio ni llevarse otra recompensa que las imágenes lánguidas, tenues de color y luz, pero sabrosas en cuanto al juego de planos a distintas escalas y alardes geométricos; como protegiendo su mirada a través de cualquier cristalera húmeda y sucia que encontraba a su paso. Rastreó las calles como Garry Winogrand, William Klein, o Robert Frank, pero no recogió los frutos de la fama estelar como ellos, aunque su obra era bien conocida, hasta un momento tardío.
   Sus inquietudes artísticas, las mismas que le provocaron un cisma familiar, hijo de un judío ortodoxo que se llevó un profundo disgusto al conocer las intenciones del hijo de trasladarse a Nueva York, a seguirle el hilo a los expresionistas abstractos, fueron las que le dieron pie a apostar por la experimentación personal y la búsqueda de una entidad propia a la hora de construir cada una de aquellas imágenes en un color de paleta débil que él conseguía a través de una película que ganaría presencia décadas más tarde, la Kodachrome, a la que no dudaba en hacerle pruebas y someterla a retos más allá de la caducidad de la misma. Sus imágenes de calle causaron notoriedad a partir de la entrada en la Galería Howard Greenberg -quien anunció su muerte-, así como en ¨varias exposiciones individuales a partir del 2006, que también llegaron a Europa, y un libro, “Saul Leiter: Early Color”, prologado por el historiador Martin Harrison.
   Leiter realizó durante dos décadas, hasta los ochenta, una obra igual de perdurable, con la misma mirada pictórica y contemplativa en el campo de la moda, trabajando para publicaciones como Elle, Vogue o Esquire. En más de una ocasión se mostró despreocupado por el éxito, al mirar las imágenes uno imagina que también del tiempo.

*Publicado en La Revista 15/12/2013

9 dic 2013

Por palabras #Moda#Paula Corral

De Moda
Paula Corral, Pontevedra, 27 años, modelo

José Paz





  La mañana nos envuelve con máscara de frío y témpano; no hay guarida que nos libre de tanto acecho.
    Pontevedra se presenta -como siempre- solemne y pétrea. Paseando por su calles uno encuentra razones para el deleite calmo, pero es mañana y no tarde, es otoño y no tarde de verano a la espera de consumir la noche mientras nos alcanza el lucero del alba.
   Paula nos guía por las calles empedradas mientras encontramos acomodo al destino, a ella toca lucirla ahora como debe; como el mar envolvería al náufrago del oleaje mientras lo lanza a la orilla.
Con ella no hay naufragio posible, ni destino en la otra orilla. Alejándonos del mar como el mismo náufrago haría, aprovechamos el itinerario de vuelta -antes el de ida-, en muestra de agradecimiento y sin desaprovechar momento.
  El sol lanza sus delicados brazos y la mañana de otoño se va, entre palmeras, y enmudece para siempre.

*Publicado en La Revista 8/12/2013

Los vicios de un monarca #Iconos#Alfonso XIII #Erotismo

Iconos

Imagen: "El confesor", 1920. Una de las películas "producida" por el monarca Alfonso XIII.
Autores: Ricardo y Ramón Baños.

"El Confesor", 1920

 Alfonso XIII era reconocible por su refinado mostacho y sus piernas de alambre. Pionero en la práctica del golf, demostró muchas habilidades para mantenerser en el poder, y mira que vivió  momentos convulsos, la Semana Trágica, el Desastre de Annual; sin olvidar los insalvables problemas políticos, así como la mala situación de las clases populares. Ante la ingobernabilidad política se encomendó a Primo de Rivera para que tras un golpe militar formara gobierno; con igual oportunismo que tras el alzamiento franquista se declaró -desde el exilio- “falangista de primera hora”, por si le restauraban los privilegios que la República le había negado. Franco le negaría la mayor, aunque anuló la derogación regia republicana, no estaba por la labor de compartir el poder con nadie; el monarca, entonces, renunciaría en favor de su hijo Juan.
  Alfonso XIII como rey, gozó de una vida privilegiada y algunos vicios de clase, los relató el historiador Román Gubern hace unos años. En aquellos conflictivos años 20, el monarca, dada su afición al artisteo, recibe a Anita Loos, afamada guionista de "Los caballeros las prefieren rubias". En medio de la conversación el rey le pregunta por un actor, Fatty Arbuckle, estrella del cine cómico. El actor en cuestión, en 1921, se vió inmerso en una orgía muy común -segun parece- al Hollywood de la época, fue acusado de la violación de una starlet, Virginia Rappe, con una botella de champán; ella murió a los dos días. De la acusación salió indemne, aunque su carrera no prosperó. Loos le cuenta todo esto al monarca, y éste le contesta: “Que mala suerte, si eso le puede pasar a cualquiera”. El relato, y el retrato, así queda recogido por Loos en sus memorias, "Adiós a Hollywood con un beso”.
  Aficionado al erotismo, el monarca encargó al Conde de Romanones la producción de varias películas pornográficas, “El confesor", “El ministro”, “Consultorio de señoras”, son las que se conservan, Franco -más retraído- no compartía la visión de un monarca pornógrafo. Las películas las dirigieron en Barcelona a lo largo de aquella década Ricardo y Ramón Baños. Alfonso XIII, al margen del encargo, aportaba ideas para el guión. Hoy se conservan en el Museu de L'Eròtica de Barcelona.

*Publicado en La Revista 8/12/2013

1 dic 2013

Será por tablas #Moda#Alba Messa#La Revista

De Moda

Alba Messa, 27 años, Lugo, actriz

José Paz




Érase una mujer a un escenario pegada, érase una actriz superactiva. No hay broma ni parodia en este arranque a lo Quevedo, de cuando el ilustre literato parodiaba la nariz de Góngora, es tan sólo la sensación que uno siente al ver el largo currículum de esta lucense que trata de no pararse, por si las moscas, imagino.
  Le pregunto desde cuándo está en el oficio, "desde los seis años -responde- que fue cuando me subí por vez primera a un escenario para cantar". Y así lo hace constar en su biografía de niña artista, de esas que vemos tanto o más en el cole que en los platós de televisión. Aunque a Alba desde entonces le diera tiempo a hacer muchas otras  cosas, hasta periodismo, aunque los vuelcos de la profesión le provoquen sarpullidos. Además de cantar y bailar, hace teatro, televisión, cine y lo que fuera, que a la chica lo que es arrojo no le falta, para que luego me apunte su madre, en la calle y sin conocernos de nada, tan sólo la intuición del destino, que por las mañanas le cuesta levantarse.   Por Lugo -donde quedamos- la reconocen sus vecinas, amigas, "yo no visto así normalmente, es que voy a hacer unas fotos", le advierte a una amiga con la que nos cruzamos; no duda en señalarle la gala que presentará al día siguiente. Será por alma polifacética, este mismo día toca peli por tierras asturianas.
La sesión de hoy va de puro callejeo, en su ciudad; Alba a lo suyo, siempre sobre el escenario.

*Publicado en La Revista 1/12/2013

La mirada del poeta. #Iconos# José Ángel Valente

Iconos
Imagen: José Ángel Valente, 1990.
Autor: Manuel Falces.


Manuel Falces



“quizá estabas muerto. Quizá yo estaba muerto.Y de ahí la inmovilidad”. Palabra de José Ángel Valente(Ourense,1929-Ginebra,2000), imagen de Manuel Falces (Almería,1952-2010). Hoy, los dos están muertos. Hay iconos que te atrapan, que te los encuentras sin buscarlos porque los tienes en tu propia biblioteca.
  Valente el poeta profundo y místico, el malhumorado. Valente el poeta inmenso por convicción más allá de lo estético, la palabra precisa y la mirada subjetiva; Valente, el poeta cuya obra trasciende indiscernible más allá de la vida y la muerte, como lo fue su propia inspiración, su creación erudita, que lo acercó a San Juan de la Cruz y bebió en las fuentes de la literatura del Siglo de Oro; que exploró territorios desconocidos, en los físico y en lo literario, como alentando esa aventura puramente poética como búsqueda de conocimiento. Que se alejó en un momento dado de los territorios hostiles y buscó refugio en el Mediterráneo posiblemente herido de muerte y atrapado por la luz del Cabo de Gata.
  Valente versus Falces, el poeta y el fotógrafo, ambos atrapados por el misterio de los enunciados imprecisos, abiertos; la palabra visibilizada y la mirada en relato. Ambos se conocieron a mediados de los ochenta en el refugio almeriense del poeta y aquel encuentro fue para ambos fructífero. El poeta en sí siempre fue muy permeable a otras artes, muy conocida fue su relación con el pintor Antoni Tàpies, con el compositor Mauricio Sotelo a quien le propuso que fuera Jaume Plensa el escenógrafo de un proyecto conjunto.
  Falces y Valente acometieron un itinerario de pasiones encontradas, de puro placer, alrededor de aquellos territorios que en un momento determinado le atraparon. Escenarios andaluces en los que el poeta seguía el itinerario del otro místico, San Juan de la Cruz. Sobre aquellas imágenes borrosas, líquidas, como si fueran trazados, apuntes de una memoria a la fuga anotaba un pensamiento, un escrito in situ que quedaría incrustado después sobre las imágenes de Manuel Falces. Aquellos viajes dieron lugar a tres publicaciones conjuntas, “Cabo de Gata. La memoria y la luz”, "Las ínsulas extrañas", y “Para siempre: la sombra”, mucho más que un presagio.  

*Publicado en La Revista 1/12/2013

26 nov 2013

Bloguera con perro #Moda#Alexandra Pereira

De Moda
 Alexandra Pereira Romero, 25 años, Vigo,  blogger, Diseñadora




José Paz







Uno no discute la necesidad de guías en este mundo de locos en el que la peña anda desorientada a rabiar. La manada está necesitada de liderazgos, de gurús que le saquen las castañas del fuego, que le aporten luz en la oscuridad del camino. Ser bloguero es demasiado fácil, basta con abrir una cuenta y hacer brotar sobre él los primeros exabruptos con apariencia de algo en lo que supuestamente nos queremos dar de entendidos; lo realmente complicado es encontrar eco suficiente en la inmensidad del charco que es la red.
  Alexandra es una de esas rara avis que mudó de profesión -iba para letrada- para convertirse en un referente en tendencias, una guía espiritual que improvisa con estilo sobre sí misma, una especie de performer en continuidad en la que están puestas infinidad de miradas. Puede que todo haya sido cuestión de suerte, al margen de mucho trabajo, del de verdad, y acierto, pero vista la relación de empresas sobre las que pivota ahora la vida de esta viguesa, la cosa apunta muy serio, y de ello nos alegramos al límite, que la chica vale muy mucho.
La sesión toca en un Vigo al ralentí, como esos viejos motores que necesitan tiempo, pero que es cuestión de ponerse en faena. Con Alexandra es fácil, su cuerpo menudo dibuja bien en un entorno abierto, además es guapa y en esto de posar está, como se diría en el argot aeronáutico, sobrada de horas de vuelo.

*Publicado en La Revista 24/11/2013

Pecados sobre papel #Iconos#Hugh Hefner

Iconos
Foto: Hugh Hefner rodeado de sus modelos.



A Hugh Hefner uno se lo imagina eternamente en bata al borde de la cama sonriendo a cámara y rodeado de jóvenes igualmente plenas de felicidad y una rica vida interior. A veces cambiaba la imagen de la bata por un pijama liso, aunque también era frecuente verlo con una vulgar gorra de marinero. Y es que el editor de Playboy en sesenta años ha variado poco de indumentaria, menos que de acompañantes.
  Él no fue el inventor de las revistas pornográficas, cuando en 1953 pensó que una revista masculina tendría posibilidades ya había otras de desnudos, marginales y semiclandestinas, vinculadas al entorno naturista, carentes de los beneficios de otras empresas editoriales en cuanto al servicio de correos, restricciones que él mismo sufrió en aquellos primeros años. Su publicación no era pornográfica, o al menos no se presentaba así aunque la imagen de un desnudo femenino fuera el reclamo; en su primer número ya advertía que la publicación pondría a disposición de los lectores artículos de ficción y no ficción, viñetas provocativas y reportajes que mostraran a los estadounidenses los placeres de la vida. Y así fue. De hecho Hefner decidió no publicar ningún anuncio que incidiera en las preocupaciones y problemas de los hombres, lo suyo era puro hedonismo.
  Tenía 27 años y el mundo que había dibujado junto a su mujer y su hijita se precipitaba al abismo, al igual que todos aquellos trabajos que desempeñó al regresar del ejército. Si volaba con su imaginación sería capaz de hacerlo con la de sus compatriotas. Con 600 dólares obtenidos de hipotecar sus muebles se lanzó al vacío. Cuando diseñaba aquel primer número no sabía cuantos hombres de su generación compartirían sueño; entre cálculo y cálculo, 30.000 lectores para aquel comienzo no estarían mal.
  Se lanzó a comprar por 500 dólares la imagen de una Marilyn Monroe desnuda propiedad de un fabricante de calendarios del extrarradio de Chicago, una imagen cargada de erotismo y descaro tomada en 1949, antes de despegar. El primer número superó los 60.000 ejemplares. Dos años más tarde se vendían ya 400.000. Queda claro que aquel hijo de padres metodistas educado en un ambiente restrictivo intuía la singularidad y los pecados de sus conciudadanos.  

*Publicado en La Revista 26/11/2013 

17 nov 2013

La entrega cotidiana #Moda#Arantxa Mallou

De Moda
Arantxa Mallou, Santiago, 22 años, deportista




José Paz








Mide sus horas como si fuera el más lujoso de sus tesoros, tal vez porque así es posible exprimir la vida un punto más allá de lo razonable. Amable, sencilla, y positiva. Arantxa Mallou se entregó a la medicina por la afinidad que supuestamente buscaba en su pasión por el baloncesto, y se encontró con un dilema, “cada vez me gusta más la medicina en sí y no por la vertiente deportiva, que era lo que en un principio perseguía”.
  El Pabellón de los Remedios a hora punta es como una pequeña ciudad por la que transita una multitud. A Arantxa, que lleva dos años jugando en el equipo del pabellón, la reconocen muchos, y algunos se extrañan de verla en un look tan alejado de lo deportivo. Hoy le toca lucir palmito, exaltar sus otras virtudes que las tiene y muchas. Rápidamente se entrega a la sesión de fotos como si fuera una de entrenamiento, y eso es de agradecer. Aunque, de entrada, reconoce, como todos los deportistas, que ella lo de posar no es lo suyo. Servidor descubre en ella tablas, un buen perfil en cámara, y seguro que aquí, como en todo lo que toca lo hará bien. Y es que con modelos así uno repite siempre.

*Publicado en La Revista 17/11/2013

Ha nacido una estrella #Iconos#Elvis Presley

Iconos

Foto: Elvis Presley.
Autor: Alfred Wertheimer, 1956.

 Alfred Wertheimer
 Alfred Wertheimer, alemán del 29 emigrado a los Estados Unidos, tenía 26 años cuando la fortuna llamó a la puerta de su apartamento de Brooklyn. Alfred, que había cursado estudios de arquitectura y diseño en la Cooper Unión, se ganaba la vida como fotógrafo independiente trabajando para estudios de publicidad y discográficas, de hecho había superado con éxito las pruebas de la RCA Victor y figuraba en uno de los puestos privilegiados en caso de surgir un encargo importante. La discográfica era una muy potente industria cultural y los cazatalentos andaban al quite. Al otro lado hablaba una voz conocida, era su contacto en la discográfica, lo había reconocido. “Hola Alfred, tengo un trabajo para ti. ¿Te interesaría fotografiar a Elvis Presley?”. “Elvis qué?”, respondió con gran sorpresa.
  Serían 8 días consecutivos persiguiendo al hombre, al joven pletórico de testosterona llegado de Memphis. No había restricción para él, Elvis Presley no puso impedimentos a ser fotografiado mientras, entre grabación y grabación, permanecía en contacto con las fans, ni cuando descansaba, ni durante las actuaciones cuando Alfred se introducía en la privilegiada zona trasera del escenario.
  El rock como fenómeno de masas estaba por inventar, de hecho Elvis Presley sería el primero en alcanzar unas metas de popularidad nunca vistas. El Studio 50 de la CBS sería el lugar donde grabaría “Don’t be cruel” y “Houng dog”, que un mes después lideraría la afamada lista Billboard. Su imagen era potente, su música arrancaba la maquinaria de una industria que lo aprovecharía hasta el último aliento. Así, entre suspiro y suspiro, el artista recibía a todas aquellas jovencitas que ansiaban degustar el elixir de la vida encarnado en su viva imagen. Hay mucho morbo contenido sobre la esencia de una imagen icónica a rabiar. Es el retrato de un hombre al borde del estrellato. Él se enfrentó a las fans con el desconocimiento de todo lo que aquello suponía, y lo sobrellevó consciente de su privilegio, pero también él mismo fue su propio ratón de laboratorio.
  La muerte del rey del rock el 16 de agosto de 1977, redescubrió estas imágenes de Alfred Wertheimer, quien jamás olvidó aquel 16 de marzo de 1956, cuando recibió el encargo más fructífero.

*Publicado en La Revista 17/11/2013

11 nov 2013

Sureños entre llamas #Iconos #Lynyrd Skynyrd

Iconos

Foto: Lynyrd Skynyrd. 

Disco: Street Survivors, 1977




Para finales trágicos, los Lynyer Skynyrd. Pocas guitarras han sonado tan nutritivas y virtuosas como las suyas. Sus solos de guitarra –“Freebird”- podían llegar a ser infinitos, y sus conciertos, una especie de jam de talento en bucle. Los Lynyer Skynyrd comenzaron a tocar en el instituto -1964-, el nombre surgió para mofarse de un profesor que les recriminaba su pelo, sobra decir que no hicieron buenas migas.
  Se iniciaron con versiones de otros; serían las críticas recibidas por ello, junto a su pobre manera de tocar, entre otros de sus admirados The Allman Brothers Band, lo que les encaminaría a alejarse de los estudios e hincar los codos en local de ensayo. Su primer disco “Pronounced Leh-nerd Skin-nerd”, no llegaría hasta 1973. El segundo disco, “Second Helping” (1974), incluiría una canción mítica, “Sweet Home Alabama”, un regalo envenenado para Neil Young que había publicado “Southern” y “Alabama”, donde mentaba la rudeza de los hombres del sur; ellos, que tocaban siempre bajo una gigantesca bandera sureña, hacían gala de sus orígenes, aunque sus sonidos –con tres guitarras de excepción- detonaban una onda expansiva de mucho más calado, reconociéndose en el blues, el country, o el boggie, honky-tonk; sus composiciones y sobre todo, las letras, sencillas, le dieron un marchamo popular. La banda liderada por el cantante Ronnie Van Zant tuvo su momento dorado entre 1973 y 1977. Con “Street Survivors”, el quinto album de estudio de los de Florida, se incorporó a la banda Steve Gaines, un guitarrista que le dio más soltura a su música y unos sonidos más blues; el propio Gaines hacía voces –“Ain’t no good life”-, en los coros, su hermana Cassie. La portada del disco, premonitoria, los siete integrantes envueltos en llamas. Tres días después de su publicación tres miembros del grupo, los hermanos Gaines, el propio Van Zant, y el manager Phil Kilpatrick, fallecen en un accidente de avioneta camino de Baton Rouge (Lousiana). A la portada original se le eliminaron las llamas. El grupo se rehizo años más tarde; hoy continúa con el hermano de Zant a las voces y Gary Rossingtong -único miembro original- a la guitarra; nunca fue lo mismo, eso sí, el final trágico les persiguió siempre, diezmándolos en todos los proyectos.

*Publicado en La Revista 11/10/2013

Balón al área #Moda #Yosu

De Moda

José María Gómez, "Yosu", 29 años, futbolista



José Paz






Esto durará poco”, pregunta Josu. Esto, es la sesión de fotos con el lateral del CD Ourense. “Sí claro, no te preocupes, irá rápido”, le respondo. Por un momento su actitud me recuerda a la de un paciente que acude al dentista, todos pensamos lo mismo, “que sea breve e incruento”, salvo que por prudencia a uno no se le ocurre meterle prisa.
  Josu es abogado y futbolista, o a la inversa, más correcto, que el chaval lleva ejerciendo el oficio del balón desde niño. En su posición nunca ha encontrado mucha sombra, es más desde pequeño el chico apuntaba muy alto, que hubiera podido jugar en muchos equipos; se decantó por el equipo de su ciudad; hasta hoy. Uno tiene la sensación, desde fuera claro, de que es de esas personas que no se plantean demasiado las cosas que hacen, las resuelven y punto. En el área –y en la vida- no se permiten dudas.
  Un campo de fútbol es como el escenario de una batalla, o de muchas, y al del Couto, hoy, aún le quedan muescas del último envite. Las sorteamos e iniciamos el trabajo a la carrera, literalmente. El chaval tiene percha, pero lo de posar, como que no le inspira. Así que apostamos por una sesión de dentista, anestesia y acción.

*Publicado en La Revista 10/11/2013

4 nov 2013

Con el balón en la mano #COB #Moda #Gonzalo García de Vitoria

De Moda

Gonzalo García de Vitoria, 42 años, entrenador de baloncesto


José Paz



El balón y la pizarra los lleva consigo. Gasta el gesto de desafío, de chico de barrio, aunque su barrio, el de Las Arenas, sea como todo lo de Bilbao, grande y ufano. En realidad, su Bilbao es como el del chiste, porque “un bilbaíno es de donde quiere”. En realidad Gonzalo García de Vitoria, es hoy, sino un crisol de culturas, sí al menos de acentos.
  No hace falta indagar para percibir que ama lo que tiene, que respira pasión por el oficio; aunque también reconoce que le tira, como debe, la familia, los amigos… y una pasión a destiempo, viajar. Uno percibe que el entrenador, al margen de cordial, es amigo de sus amigos, y en el baloncesto se ve que los ha hecho; lo sé porque lo cuenta, a algunos hasta los enumera. En su trayectoria profesional –Melilla, Guadalajara, Burgos, ahora Ourense- siempre habrá un lugar para el Pozuelo, donde se inventó un equipo y el desinterés en la actitud por las cosas que de verdad motivan. “En la vida no siempre hay que actuar con el propósito de llevarse algo a cambio”, comenta, evocando sus orígenes en aquel pueblo madrileño al que, siguiendo a su progenitor –Josean García, jugador de baloncesto-, se vio expatriado. Aquel esfuerzo desinteresado sirvió para que, llegado el momento, Miguel Ángel Martín, primero pensara en él, y lo eligiera escudero para el equipo de la Complutense que estaba montando. Y así hasta hoy, el clímax, la copa Príncipe 2010.
La sesión, serena y hasta aburrida; la cosa cambia cuando le pido un balón y pizarra –los tiene en el coche-; le cambia hasta el semblante.

*Publicado en La Revista 3/11/2013

3 nov 2013

El vuelo del flaco #Iconos#Cruyff

Iconos
Imagen: Johan Cruyff.

Johan Cruyff
  Uno lo recuerda en cromos. El 28 de octubre de 1973 sería un día gris otoñal. Al blanco y negro patrio se le sumaban pocos destellos de color; el muy luminoso de las “suecas”, y desde entonces, el blaugrana del número nueve. Incluso para un régimen encerrado en sí mismo, la prohibición de fichar jugadores extranjeros, salvo aquellos oriundos de “escándalo” provenientes de Sudamérica, llegaba a su fin. A un mes largo del asesinato de Carrero Blanco, remataba la artimaña impuesta desde la Delegación Nacional de Deportes, 1953, por el general Moscardó, para impedir en su día el fichaje de Di Estéfano por el Barça. El deporte siempre ha tenido estrategias para salvar identidades; en los setenta había sospechas y denuncias –Real Sociedad, Athletic de Bilbao, Barça- de que aquellos oriundos descendientes de españoles no lo eran tanto, incluso un abogado ilustre, Miquel Roca, se pasó por allí a ver el pedigrí; la cosa no pintaba bien. Se descubrieron 40 identidades trucadas. Aquel lodazal de fondo permitió la reapertura de fronteras y que tipos como el espigado Johan Cruyff recayera en la liga española
Al ilustre jugador, a la postre uno de los cuatro más valiosos –Maradona, Pelé, Di Estéfano-, uno lo recuerda en cromos. El fútbol monopolizaba ya el entretenimiento y un crack como el holandés, era en sí un trofeo excepcional. En los cromos de los setenta, ornamentados con apellidos patrios, el apellido Cruyff adquiría aires cuasi liberadores, era como si aquellos 60 millones del fichaje y que tantos sudores provocó a la directiva de Agustí Montal, se repartieran entre las estampitas del holandés de gloria.
 La noticia del debut se conoció en sábado, con la temporada más que arrancada; 8 deprimentes partidos del Barça quedaron atrás, también los intentos vanos del Real Madrid por hacerse con el astro. El debut ante el Granada, un equipo leñero puso al astro en otro ejercicio más, el de librar por lo alto las piernas contrarias, amenazantes como guadañas. Él marcó dos goles, su equipo ganó (0-4). La liga, después de una eternidad, sería para los blaugranas; lo más sonado el (0-5) del Bernabéu. Los entendidos dicen que Cruyff incorporó otro concepto a la visión del juego; en nuestros ojos era el cromo más preciado, mucho más que un fichaje.

*Publicado en La Revista 3/11/2013

30 oct 2013

La chapa de Lou Reed

De Opinión


Lou Reed no ha muerto, en realidad, y eso que la ciencia lo salvó varias veces, lo estaba ya hacía una eternidad.
 Lou, icono de generaciones, encarnó lo oscuro, el lado transgresor del niño caprichoso, el inconformismo como actitud, la plenitud de vivir un momento in crescendo, el de la factoría Warhol, a partes iguales portento y dominio del negocio. Warhol le dio cuerda a la Velvet Underground que abrió el abanico del rock como si fueran porciones. Tal vez su lado más salvaje fuera ese, el del entorno Warhol –un hervidero–, mundo parejo al que desvela John Waters en todas sus películas, pero aquello fue hace medio. Una época donde cada día era una puerta a la acción y él se disponía a la aventura, a la acción transgresora y poco recomendable. El almanaque del tiempo fulminó sus páginas. “Transformer”, “Rock And Roll Animal”, “Coney Island Baby”, “New York”, son vinilos- de cuando estos se compraban con pasión y esfuerzo- que adornan desde entonces las estanterías de las mejores familias.
 Uno que no vivió el concierto de Moscardó de los 80, jamás podrá olvidar la descripción de quien sí lo vio; de flipar. El mítico Lou a caballo de todos sus vicios apuntándose a una espantada más digna de Rafael de Paula que de un potro salvaje. Nunca fue maldito, ni un músico de mayorías aunque sus fans fueran muchos y su popularidad inmensa; aprovechó bien la marca de su ciudad: él era el poeta de Nueva York. Sus canciones atormentadas, sus temáticas prohibidas quedaban como dios en una música resolutiva de sello inconfundible, pero no hablamos de un Neil Young, Bowie o un Bob Dylan….
Servidor se pasó media adolescencia con una pegatina en chapa del “Coney Island Baby” pegada a su cazadora vaquera. Era como un ejercicio de afirmación de añorada modernidad, Hacía mucho tiempo que no escuchaba sus canciones; de cuando en vez, cuando el cuerpo parecía sólido, le he ido regalando alguna como perlas sueltas. A inundarse la red de registros, como si fuera un tenderete de patio de vecinas, lo he intentado con alguna de esas baladas crudas –incluso he mirado la chapa de soslayo–. Nada, imposible, para mí hace mucho que él y sus circunstancias ya no están. Bye, bye, Lou.

*Publicado en La Región 30/10/2013

29 oct 2013

Miradas moi íntimas #Adelaida Vidal #Moda

De Moda

Adelaida Vidal, 27 anos, A Coruña, actriz e escritora



José Paz






 Miradas furtivas, miradas descaradas, miradas compartidas, tamén recreadas. Hai persoas que saen da casa para que as vexan; outras que perseguen as miradas e ninguén o fai. Corpo sedución, xente que se move para seducir á persoa amada. Convén lembrar que a maneira de vestir é a maneira que temos de significarmos co exterior. “Olladas”, a novela de Adelaida Vidal, gañadora do premio Risco de literatura fantástica vai de todo iso e moito máis, por que as novelas, como a vida hai que pescudalas e vivilas.
  A coruñesa, de corpo miúdo e áxil, é unha moza calma e sensible. Non hai moita distancia entre a autora literaria e a persoa. Ven de negro por que lle gusta esta cor, hoxe ela quere ser mirada como as personaxes da súa novela. De mirada pétrea, garda un punto de misterio como quen esconde algo. Na sesión incidimos na escuridade, nese punto misterioso que posúe e que de cando en vez zumega coa forza dun mar de fondo, é cuestión de seguir o fío e agardar o impacto.

*Publicado en La Revista 27/10/2013

Romasanta, el sacauntos #Iconos#Romasanta

Iconos

Foto: José Luis López Vázquez, 1971.
Película: "El bosque del lobo", de Pedro Olea.


José Luis López Vázquez

  Finales de junio de 1850. Un ser siniestro y manipulador trenzaba sus últimas tropelías. La víctima, José, de veintiún años, e hijo de madre soltera, o de padre desconocido, como ustedes prefieran. Vestía capa larga y amplia, de color castaño y paño corriente, recién comprada; dado su origen, un verdadero lujo.
  En aquel Ourense al pie de la Sierra de San Mamede, los trayectos hacia Castilla brujuleaban en dos direcciones y ambas pasaban por Ponferrada, para bifurcarse después hacia la costa o hacia el interior; Portugal y América, eran otros destinos bien recurrentes. Manuel Blanco Romasanta (Regueiro, Santa Olaia de Esgos - Ceuta, 1863) como “quincalleiro” ambulante conocía bien aquellos caminos, comunes a segadores y afiladores. Ambos emprendieron, al menos en lo teórico, destino hacia Santander. Antes Romasanta cortejó a la madre. Entre Rebordechao, en Vilar de Barrio, escondite del ambulante y Castro de Laza, lugar de la cortejada, las distancias a lomos de un borrico eran salvables, tanto que a él le veían por allí casi a diario.
El propósito de Romasanta era llevarse a los dos, madre e hijo, hacia tierras prósperas, donde el sacamantecas desde el año 1843 había derivado a un buen número de mujeres y vástagos, pobres e incautos, quedándose con sus voluntades y pertenencias. Se tuvo que conformar con el hijo, la madre iba mayor para esos trotes. A Romasanta lo vieron regresar, días después de su marcha, lustroso y con la capa a la espalda, para revenderla al párroco que le prestaba el borrico. Lo que se descubriría después de tanto tocomocho cruel, tras su detención en Nombela, Toledo, denunciado por compatriotas conocedores de sus andanzas desataría el asombro y una leyenda imborrable. Sería juzgado en Allariz y sentenciado a garrote vil, un año duró el juicio; la pena sería conmutada a instancias de Isabel II.
  Durante años Romasanta vendió ungüentos de grasas cuya procedencia fuera probablemente de origen no animal. En el juicio, que duraría casi un año, se aferró al cuento de la licantropía y la mutación de que era víctima, igual que antes embaucó a sus víctimas –trece- con un futuro próspero en Santander, destino al que el sacamantecas nunca llegaría;  tampoco sus víctimas.

*Publicado en La Revista 27/10/2013

Envolturas de silencio

E l invierno envuelve cada rama entrelazadas entre sí por el frío y la niebla que lo atrapa todo en un escenario de aventura. Todo es ...