La chica del hockey # Moda

Enfoque 

Olalla Piñeiro (Ourense, 1984), internacional de hockey

José Paz

  Decía Borges que había que inventar ese deporte en el que no hubiera ni vencedores ni vencidos. El deporte eterno, el deporte sin final. La vida es lo más parecido a una competición con el resultado oculto, una de largo recorrido, en la que el que resiste -como diría Cela, es el que gana. A Olalla Piñeiro lo del deporte le viene en vena, quizás por ello todo es como más natural o así se intuye desde la distancia.
   Un día cualquiera de verano afrontamos una cita que se ha hecho de rogar. Ser deportista de élite tiene esas cosas, primero los compromisos de la liga regular con el madrileño Club de Campo y después los de la selección, un lujo de chica que a sus 28 años puede estar más que satisfecha con sus resultados.
Afrontamos una sesión de tránsito con la vestimenta oficial para ejercer un destino playero aunque lo que pisemos no sea más que una piscina. La chica cumple con el temple característico de tantos deportistas, resignación y buena letra. Lo de posar le cuesta, para qué nos vamos a engañar, pero lo llevamos bien o muy bien, que es de lo que se trata. En esto como en la alusión deportiva de Borges, lo mejor es que no haya ni vencedores ni vencidos.

*Publicado en La Revista 8/07/2012