 |
| Ernesto Che Guevara, 1960, de Alberto Díaz Korda |
Los desencuentros entre los Estados Unidos y Cuba llevan muchos años en vigor, más o menos desde que los hermanos Castro se hicieron con el poder allá por 1959. Dicen que la decisión fue un dramático error -o algo más-del actual presidente cubano, Raúl Castro. La descarga de mercancías peligrosas directamente en el muelle estaba prohibida, pero la realidad fue que el carguero La Coubre con 76 toneladas de municiones belgas procedentes del puerto de Amberes estalló por vez primera mientras se procedía a su descarga, la segunda vez, media hora más tarde, pulverizó literalmente a todos los que acudieron a promover el auxilio. Los muertos fueron alrededor del centenar, aunque se supone que hubo bastantes más. La responsabilidad de la explosión siempre se le atribuyó a los servicios secretos norteamericanos, que durante muchos años manejaron con obsesión y falta de tino la posibilidad de liquidar a Fidel Castro y rematar así con el régimen. Fue el propio Che Guevara, que se encontraba en un lugar próximo, quien prestó atención médica -el lider revolucionario al margen de escritor y periodista, también era médico-y alivio a los heridos.
La imagen más reproducida de la historia fue tomada por el fotógrafo cubano Alberto Díaz "Korda" (1928-2001) no durante el accidente sino en el sepelio - el 5 de marzo de 1960- celebrado por las víctimas de la explosión. Korda fue testimonio vivo no sólo de ese momento, sino de toda la Revolución Cubana; también un comunista convencido. La fotografía estuvo inerte durante más de siete años y fue entonces, coincidiendo con la muerte del protagonista, cuando, con el mito en ciernes, todos los adeptos a la causa la utilizaron como icono, pero para ello tuvo que intervenir otro personaje más, Giangiacomo Feltrinelli, un editor y militante comunista italiano que tras el óbito localizó las imágenes para una biografía, y el propio Korda, quien no vio mal colaborar a que la memoria del Che pasara a ser universal gracias a su difusión en posters. Durante varias décadas fue la imagen más arraigada en el espíritu revolucionario de millones de jóvenes de todo el mundo, incluso para causas bien alejadas, como cuando una marca de vodka que pretendía utilizar la imagen del líder revolucionario para comercializarlo como tal, momento que obligó al propio Korda a mediar en su contra.
Imagen: Ernesto “Che Guevara”
Autor: Alberto Díaz, “Korda”, 1960
No hay comentarios:
Publicar un comentario