Iconos Sexo Perfumado
Ya de niño prefería dibujar mujeres que jugar con sus juguetes. Soñaba con Twiggy o Veruschka, modelos de la época, y hacía pasar a sus amigas por la secretaría del mismísimo Richard Avedon pidiendo fotos de las modelos a las agencias. Así fue como conoció a Twiggy. Nada distinto de lo que haría cualquier otro joven obsesivo, todo artista lo es, por abrirse se camino en su oficio. Steven Meisel (Nueva York, 1954) empezó trabajando como ilustrador, lo de fotógrafo vendría después llegando a trabajar con las mejores revistas, entre ellas edición italiana y americana de Vogue, y en grandes campañas publicitarias de Versace, Valentino, Dolce & Gabbana y Calvin Klein. Lo que de niño fue un deseo, de adulto superó la realidad, él fue el encargado de fotografiar a Madonna en aquel libro de desnudos de la cantante en 1992, y de él también se han dicho no pocas petulancias, como aquella de que no salía de casa por ningún proyecto menor a un millón de dólares.
Opium es un clásico en la perfumería de Yves Saint- Laurent, sus campañas publicitarias también. Un perfume de alta concentración, creado en 1977, con nombre provocador, sinónimo de droga, pasión y embriaguez. Un aroma que sin duda genera dependencia entre quienes lo perciben, la misma que a un servidor le provocó, no el perfume –el más vendido en el mundo- sino la radical campaña planteada por el director y diseñador Tom Ford (Texas, 1961 ) y fotografiada por Steven Meisel en el 2000. Decir que como diseñador de Gucci, Ford, fue quien de levantar una marca, YSL, por aquel momento en crisis.
La imagen de la pelirroja Sophine Dalh (Londres, 1977) sobre un satén negro, a imagen y semejanza del perfume, es semiótica en estado puro, sutil evocación de una imagen en otra, ella imitando el color del propio frasco. La fotografía es,apoteósica, de una fuerza inusual, con una impresionante carga sexual que dinamita con todo. Imagen llevada al extremo, en algunos países la campaña fue premiada, España, y en otros, Inglaterra, directamente prohibida; de lo que estoy seguro es que no deja a nadie indiferente. El propio perfume, por su nombre, ya había tenido problemas en algunos países. La voluptuosa modelo posicionada desnuda a imagen de Marilyn genera tormentas, y ese giro de cuello para observar y descubrir algún significado en su rostro es pura pasión.
Fotografía:
Sophie Dalh, 2000
Autor:
Steven Meisel
Campaña:
Opium, de Yves Saint- Laurent.
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